Los mejores están en mi vida

Por esos amigos tan geniales,
Por esos amigos que hacen que un sábado sea espectacular... Y cualquier día del año.
Aunque ellos digan que no salió bien, fue algo maravilloso, sois mi perfecta imperfección.
Aunque a veces no entendáis mis decisiones o no las aprobéis, siempre me aconsejáis lo mejor posible y, si al final hago lo que quiero, estáis ahí, aunque falle, y sin ningún "te lo dije".
Porque tengo los mejores amigos del mundo.
Porque esto va dedicado en especial a Andrea, Víctor, Patri y Marta.
Gracias también por supuesto al resto pero ellos cuatro se merecían la mención por ser los mejores y por hacerme a mí mejor cada día.
No desde siempre pero sí para siempre, chicos, no os hacéis a la idea de lo que significáis para mí y lo que os quiero.
¡Un millón de gracias!

Vaivén

Vuelvo a escribir después de un tiempo, aún sin saber si las palabras acudirán a mí pues últimamente parece que todo me cuesta.
Me siento en una montaña rusa, en un vaivén emocional y físico que me agota. Alegre, triste, enfadada, frustrada, alegre, llorosa, agotada y de nuevo alegre. Y así varias veces al día.
Depresión, le dicen. Estar recién operada, me aseguran.
Pero me siento agotada. Agotada de aguantarme como si fuese una niña malcriada que no sabe hacer nada, cansada de cansar a los de mi alrededor.
¿Cómo pueden no hartarse si hay ratos que ni yo me soporto?
Y parece que trate de ocultar algo pero lo único que trato de ocultar es mis cambios de humor aunque a veces sea imposible disimularlos.
Acabo de sentirme inútil haciendo una ensalada. En serio, necesito sentirme más yo pero este cansancio me puede...