sábado, 31 de marzo de 2018

Día a día

Así es como voy, día a día, paso a paso. Parece que durante el día es más sencillo, me distraigo o lo intento y todo fluye pero cuando llega la noche el tiempo se hace eterno.
Te echo de menos, muchísimo, parece que cada sonrisa que consigo viene acompañada de una punzada de dolor a modo de recordatorio de que ya no estás.

Y es cierto, ya no estás.

miércoles, 28 de marzo de 2018

No estás

Dos días y te aseguro que lo intento. Me duermo llorando y me despierto llorando. Hoy he cogido el móvil para llamarte, quería contarte que mi día era triste pero me he dado cuenta de que no puedo. Ya no estás. Intento rodearme de gente pero estás en mi mente, cuando por fin sonrío recuerdo nuestros momentos y eso duele porque ya no estás.
Ayer te dije adiós. O lo intenté, porque de momento no estoy preparada. Ayer parecías dormir, tan pacífica... Solo así me di cuenta de todo lo que estabas sufriendo. Ahora ya puedes descansar, me repito continuamente, pero te sigo necesitando, te sigo extrañando.
Niña, esto duele con cada respiración. A veces creo que ya no voy a ser capaz de llorar más pero luego descubro que sí, que no termino.
Voy a darme mi tiempo, mi ritmo. Te prometí luchar y ser feliz y lo voy a lograr pero necesito llorar primero, asimilar esto y sanar. Eso sí, jamás te voy a olvidar: ni puedo ni quiero.
Siempre, mi Pandora.

lunes, 26 de marzo de 2018

Vuela, mi pequeña pluma

Me había echado un rato a dormir con la esperanza de despertar y que esto fuese una jodida pesadilla. Pero no. Me he despertado y no estás, y el dolor ha venido de golpe. Otra vez.
Me siento como si hubiese retrocedido muchos años, esto ya lo viví, pero tampoco. Porque tú eres única. Eras. No puedo hablar de ti en pasado cuando para mí sigues presente.
¿Cómo estar sin ti? Sin mi mejor amiga, mi hermana, mi Parabatai.
Ahora ya descansas, ya no vas a sufrir más porque solo tú sabes lo mucho que luchaste hasta el final. Yo seguiré luchando, como te prometí pero tú dijiste que me ayudarías y necesito que me ayudes a aprender a estar sin ti.
Esto duele demasiado, siento que las lágrimas me van a ahogar y tú no estás para abrazarte...
Ya volaste, mi pequeña pluma...

URGENTE

Es un día de puta mierda. Hoy nuestra querida Pandora se ha ido.
Es un momento muy difícil para nosotras y espero que podáis comprender que necesitamos tiempo. Os pido respeto, sobre todo para nuestra Andy, que ahora necesita todo el apoyo del mundo. 
Pandora, mi pequeña criatura, ahora por fin descansas. Jamás te olvidaremos. 
No vamos a responder correos por el momento, el blog se queda como medio de desahogo...
Para siempre, Pandora.
{Martita_}

domingo, 18 de marzo de 2018

Aunque de los errores se aprende, mi mayor miedo es volver a cometerlos.

Onceeeee por Cake

Hoy, justamente hoy, hace once años que nos conocemos, que se dice pronto. Joder si es que nos ha pasado de todo, chacha. ¡Nos hemos hasta dicho que nos odiamos! Pero a pesar de todo sigues siendo mi hermana, mi mejor amiga, la persona en la que más confío del universo. Ahora estamos un poco lejos pero sé que nada nos separa, me lo demuestras cada vez que estás a mi lado en mis bajones. ¿A quién más le voy a contar las cosas surrealistas que me pasan? ¿Quién más va a saber lo que significa cuando digo letras sin sentido?
Nadie más que tú.
Igual que me gusta reírme cuando te escucho decir que echas de menos el piercing del labio o que tienes mono de tatuarte o que las estrellas brillan mucho.
Creo que nos hemos aguantado mutuamente todo, yo te escucho hablar sobre tu querida Tani y tus sobrinas y tú a mí sobre motos y mi nuevo enamoramiento de la semana. Doy gracias por esas conversaciones tan random que tenemos y por las serias, también. Por hablar de nuestros infiernos y entendernos o intentarlo sin juzgar. Por cada secreto o problema contado y saber que el otro estaba ahí.
Me hubiese encantado ir a Rulo contigo aunque no me guste su música habría gritado como el que más las letras y habríamos estado ahí 10 horas antes para darle tu libro en mano o lo hubiésemos esperado a la salida. Ojalá ir también contigo a ver a ese grupo que te encanta pero que es impronunciable (esos ya no me los aprendo que son raros). ¿Sabes por qué? Porque aún recuerdo cuando fuimos a ver a Decai y no te gustaba para nada pero te aprendiste las letras y los acosaste hasta que me pude hacer una foto con ellos.
Yo sí que soy afortunado de decir que somos mejores amigos, que te llevo tatuada y que nos entendemos.
Por once vidas más de amistad llenas de risas, de verte mover la cabeza ante mis ideas, de ver tu mirada cuando se te ocurre alguna locura a ti. Por seguir tratando de convencerte de que vuelvas a disfrutar las fiestas, de verte gritar como una niña en las colchonetas, de reírme cuando te pides tu malibú o el batido borracho ese asqueroso pero que al rato ya vas de lado a lado, de que no te quites tus perfiles porque para ti es importante. También por estar juntos en los malos momentos, por renegarte cuando te metas en una pelea, porque sigas siendo como eres en todas tus facetas, porque sigas siendo Peque y yo Cake y, sobre todo, por impedir que nadie más intente cortarte las alas y apagar tu luz, pequeña estrella.
Todo lo demás ya lo sabes, incluso las cosas que no se pueden contar.
Y si alguien lee esto y te quiere cambiar que sepa que se las verá conmigo, Jum!
Siempre, hermana.

Insomnio

Doy vueltas y pienso. Pensar... A veces creo que me va a estallar la mente pero no puedo evitarlo.
Pienso en lo positivo y en lo negativo, en los argumentos que parecen tan sólidos en mi mente pero que al decirlos en voz alta pierden la coherencia que tenían. Muchas veces pienso en la poca lógica que tengo en ocasiones.
Odio enfadarme porque la ira me hace ser impulsiva con lo que digo, pero a veces mi carácter estalla y después me quedo agotada, supongo que necesito seguir aprendiendo a gestionar mis emociones.
Ayer tuve un día en el que la ira me dominó parcialmente pero logré reprimirme bastante, sabedora de que hay cosas que me molestan que, dichas en voz alta, son estúpidas.
Tengo que dejar de darle vueltas a como me hizo sentir el tema de la redes sociales, tengo que acallar estos estúpidos pensamientos, tengo que dejar de querer consuelo en lo que me molesta como si fuese una niña, tengo que dejar de creer que entenderme es fácil, tengo que...
Tengo que intentar dormir.

viernes, 16 de marzo de 2018

Pandora ❤

Parece que por fin saco algo de fuerzas para escribir. Lo primero de todo quería agradecer el apoyo de todos, vuestros emails han sido una gran motivación. No poder hablar es bastante malo porque me gustaría decir todo esto con mi voz pero supongo que escribir es una manera válida también. Esta es una carta a mi mejor amiga, y la escribo ahora porque he descubierto que la vida es impredecible y nunca hay que dejar de decir las cosas.

Aún recuerdo la primera vez que nos vimos (¡Qué mal me caíste! Y yo a ti, la verdad), pero un tiempo después estábamos riendo juntas. Siempre he sentido como si te conociese de antes y ahora te hubiese vuelto a encontrar pero la verdad es que soy la más afortunada por poder decirte mejor amiga.
Muchos dirán que nos ha unido una enfermedad, pero yo creo que ha sido mucho más, ha sido la amistad verdadera.
Gracias, mil gracias, porque sin ti no estaría viva. Gracias por no desistir cuando yo sí lo había hecho, por creer en mí, por no juzgar, por entender, por ser paciente, por no dejarme sola aunque yo lo pida, por sostenerme en la caída, por discutir con el mundo entero por mí, por las broncas y los abrazos. Me quedo con todos los momentos juntas.
Quiero pedirte que dejes de intentar cambiar tanto, eres increíble como eres ahora. Sigue perdonando siempre, sigue siendo de lágrima fácil, defensora de tus ideas y no te dejes manipular por nadie. Quiero que sigas llorando con las películas, que te pierdas con un buen libro, que sigas luchando, que te hagas esos tatuajes que tanto deseas, que te tiñas el pelo, que pidas perdón antes que permiso. Que sigas queriendo todos los animales que ves, que no pierdas tu sarcasmo ni tus momentos infantiles, que luches con tus inseguridades...
Quiero que seas tú.
Porque gracias a tu forma de ser ya no eres esa pequeña estrella, no, eres la estrella más brillante de todas y estoy orgullosa de ti, de que te levantes día a día y no te dejes tumbar por nadie.
Y aquí estaré yo para escucharte cuando lo necesites, para no juzgarte y entenderte.
Somos hermanas, ¿recuerdas?
Te quiero mucho mi Parabatai

martes, 13 de marzo de 2018

Meter la pata, en eso tengo un máster. En perder a la gente que quiero. 
Insomnio, dolor de cabeza... Son mis compañeros. Las lágrimas, que no falten. 
A veces pienso que no valgo, que lo que mejor hago es ser estúpida. 
A veces estoy harta de mí y de ser así.

lunes, 12 de marzo de 2018

.

Amargo, antes contenido a duras penas, ahora fluye como un río mientras aferra la manta de leopardo y piensa.
El monstruo se regodea, diciendo que nada merece, que acabará sola, que solo sabe fastidiarla. 
Entre hipidos y dolor en el pecho, entre esas lágrimas que nunca acaban, un te amo susurrado apenas, entre las risas del monstruo que habita en esa mente...

jueves, 8 de marzo de 2018

Hoy es nuestro día (colaboración de marchitada)

Hoy es el día de la mujer pero yo quiero destacar a una que me está enseñando mucho últimamente, una de mis compañeras favoritas de prácticas.
Perdóname pero tengo que decirlo: tienes una fortaleza increíble. Sí, sí, ya se que estás harta de escucharlo y que no te lo crees pero es la verdad. Es cierto que tienes días malos y que son muchos pero yo valoro tu capacidad de vivir, de ayudar a los demás y de no rendirte a pesar de todo. Mucha gente se habría rendido ya o pasaría de convivir día a día con las enfermedades que le hicieron pasar un infierno pero tú lo haces para ayudar a otros. Te he visto ser comprensiva, alegre, dura y lo que hiciese falta con tal de ayudar mientras tú te sentías alguna de esas veces mucho peor que la otra persona. Nunca te he visto negar tu ayuda a nadie y eso, amiga, significa que tienes un corazón enorme. Hoy he llegado a admirarte mucho más, cuando has sido la voz de las que tienen miedo, cuando has aguantado con dolor pero sin dejar que se note, todo por ayudar. Muchos días te veo moverte en la silla sin quejarte, aguantar el sueño que dan tus pastillas y las pocas ganas que a veces tienes de estar ahí pero lo haces, y eres de las mejores.
Te preocupa que nunca te pongas bien pero, cariño, no te vamos a abandonar por eso. Muchos te admiramos, te queremos y vamos a estar ahí ya sea con anemia, epilepsia o lo que sea, no estás sola.
Cuando te falten fuerzas estaremos ahí para sostenerte y evitar que caigas, al menos yo lo haré y ánimo a los que te quieren a que hoy te lo digan, porque entre tus cualidades sé que está la inseguridad y a mí no me importa decirte las veces que haga falta:
SOY AFORTUNADA DE TENERTE COMO AMIGA. GRACIAS.
Esto va para una gran psicóloga (no digo futura porque ya lo eres, aunque el título no esté).
Y por supuesto feliz día de la mujer, juntas podemos pero mejor que sea juntas y juntos!!

domingo, 4 de marzo de 2018

Madrugadas

Siempre habrá madrugadas grises, de esas que la mente se enreda en pensamientos que de normal tratas de ignorar.
Madrugadas repasando la vida, las cosas que haces y cuántas estarán mal. Madrugadas negativas.
Madrugadas en las que ojalá tuvieses sus brazos a tu alrededor para espantar las pesadillas.
Madrugadas en las que dejas que los monstruos de tu infierno campen a sus anchas mientras abrazas un peluche y esperas la salida del sol.
El sol...
...Nunca olvides que siempre sale.

sábado, 3 de marzo de 2018

Depresión

Vigorexia, trastorno de personalidad, anorexia, TDAH... Cada vez tienen más visibilidad y las personas buscan ayuda antes, pero ¿qué hay de la depresión? Cuántas veces habré escuchado lo de "eso es una tontería, sólo tienes que sonreír".
Llevo diez años conviviendo con la depresión, casi a la vez que empecé con los trastornos alimentarios. Ahora que por fin veo la salida de la anorexia y la bulimia ha sido momento de centrarme en esa otra compañera que tan poco visible es a veces.
Depresión.
No ser capaz de levantarse de la cama muchos días y luego sentirte culpable. Llorar sin motivos aparentes cuando los demás ríen. Sentirte sola rodeada de amigos. Ser experta en excusas para no salir de tu burbuja, miedo, ansiedad, cansancio y muchos síntomas más. Incomprensión de la gente y probar un antidepresivo tras otro. Ideas que no deberían ser, cambios de humor continuos...
Desesperanza.
Diez años después estoy encontrando la salida a todo esto. No es fácil sin el colchón de la medicación pero aparte de ser experta en excusas también lo soy en luchar cada día contra mi propia mente, por eso sé que lo lograré. Que puedo ganar.
Que yo sí puedo, que yo sí creo en mí.
Y si alguno de vosotros se ve en esta situación os animo a pedir ayuda, a creer en vosotros mismos aunque de cada cinco días, seis os sintáis sin ganas, porque eso cambiará algún día pero depende de que queráis ese cambio y aceptéis que las caídas están ahí y que, por supuesto, nadie es perfecto.
Yo creo en ti.