Tú eres de verdad porque los de verdad están, aunque los intentes alejar, siempre con ese abrazo preparado para curarte los días malos, con ese "mañana mejor, ya verás". Y contigo sé que mañana siempre va a ser mejor, porque, aunque haya personas a las que no podemos borrar por muchas cosas que pasen, lo bueno suele prevalecer lo malo. Y las buenas personas que están con nosotros siempre van a ser lo más importante, y lo que más pese en la balanza de si un día es malo o no. Que sepas que te admiro de verdad por guerrera, y porque nunca te rindes. Hay que dejar atrás para poder disfrutar lo que tenemos delante, hay que despejar la cabeza de dudas, de rutinas, de peros y llenarla de "a por ellos". No entiendo cómo no te ves invencible, insuperable, imborrable, porque yo es lo único que veo cuando te miro a los ojos.
Para mí es un honor poder llamarte amiga y con todo esto quiero que sepas que a pesar de que ahora vienen unos meses muy difíciles, yo sé que vas a poder con todo eso y más; aunque tú no lo creas, aunque estés llena de miedos y pienses que la otra vez no funcionó y todo terminó en soledad. Te lo hemos dicho mil veces, que no estás sola, que vamos a estar ahí para sostenerte, que puedes descansar y centrarte en ti porque cuando estés bien seguiremos aquí, esperándote con los brazos abiertos. Vamos a comprender tus días malos, los días que no quieras salir de la cama e incluso los que no quieras vernos y no por ello te vamos a querer menos, al contrario, te querremos más por el esfuerzo que haces en recuperarte.
Todo va a estar bien, aunque va a costar y a dolor.
Tú has podido, tú puedes y tú podrás.
Te quiero chiquita mía,
Karen
No hay comentarios:
Publicar un comentario