Cuando la piel se convierte en lienzo

Hace cinco años decidí hacerme mi primer tatuaje. No quería llevar cualquier cosa, sino algo con significado. Y ahí fue cuando empezó mi historia con los tatuajes, algo que algunos, dado que en otras entradas lo comenté, me habéis preguntado alguna vez.

Este fue mi primer tatuaje. Una letra que en chino significa "lucha" y en japonés "resistencia". Me lo hice en una etapa de mi vida en la que lo único​ que sabía hacer como método de escape era cortarme. El tatuaje fue un recordatorio a partir de ese momento para no hacerlo más, para resistir y luchar por vivir.

Mi segundo tatuaje fue el símbolo de la salud mental: el punto y coma. Fue también un guiño a mi faceta de escritora ya que cuando se pone este signo de puntuación significa que la frase no ha terminado, que no es el final. Este tatuaje significa para mí un recordatorio de un momento muy malo que pasé, en el cual pensé en acabar con todo pero decidí continuar, ya que vivir siempre merece la pena.

El tercero y en honor a mi segunda madre, mi yaya. Aunque fue sobre todo por mi abuela materna va por la paterna también ya que se llaman igual. Un recordatorio de lo luchadora que fue siempre, hasta el último momento, siempre pendiente de todos a pesar de que el cáncer se ensañaba con ella. Nunca la olvidaré y este fue mi homenaje a ella, el cual le encantó.

Homenaje a mis padres, pero sobre todo a mi madre, por su tesón y sus ganas de vivir. Otra gran luchadora a la que llevo tatuada en la piel y a la que le ha encantado este detalle (igual que a mi padre). Para el que le cueste verlo, es una madre/padre abrazando a un hijo.


Y del último no pongo foto, pero no porque sea menos importante, sino porque es algo que prefiero enseñar solo cuando me apetece. Es un tatuaje muy especial, dedicado a una de las personas más importantes de mi vida. Después de años diciendo que no me haría uno de este tipo, me he tragado mis palabras encantada. Porque hay personas que merecen la pena, y este es el caso. ¿El significado del tatuaje? Que las almas gemelas existen, que el amor verdadero no siempre es el primero pero acaba llegando, y que por muy roto que estés siempre llega alguien que te ayuda a volar de nuevo.

No sé cuánta tinta más me espera, desde luego ninguno grande porque me gustan las pequeñas pinceladas, pero solo el tiempo lo dirá, de momento me plantaré con uno más y es que no podría parar sin tatuarme "perfectamente imperfecta" pero eso más adelante.