Cuando empecé a escribir "Mi infierno personal" pensé que no llegaría a ninguna parte. Hoy, dos años después, justo cuando pensé que no tenía tanta aspiración, llegó mi oportunidad. La oportunidad de darme a conocer.
Pero a veces hay que rechazar las cosas por mucho que duela y ser realistas: es algo que me viene grande.
Hoy traté de vender al lado de dos conocidos escritores y sentí por primera vez esas ganas de que mi libro fuese reconocido, de poder triunfar... Y me vino grande por falta de medios.
Gracias a todos los que hoy habéis hecho el esfuerzo aunque el objetivo quede lejos; gracias a los que habéis comprado mi libro por segunda vez y os habéis negado a coger el cambio... Mil gracias por todo, lo hemos intentado pero es momento de rendirse.
A veces hay que saber perder.
No hay comentarios:
Publicar un comentario