¡Buenos días a todos en este martes casi invernal! Estaba yo tan feliz cuando de repente le he visto la cara a nuestra querida Andy y ya estaba todo dicho: se iba a desmayar. Pálida, sudorosa... Yo estaba demasiado lejos pero su querido loquero ha hecho las veces de supermán y la ha cogido a tiempo. Y ale, a convulsionar. Y yo a llamar a la ambulancia:
- A mi amiga le ha dado un ataque epiléptico...
- Dígame edad, grupo sanguíneo, si existen los unicornios... (ironía modo on)
- ¡Está convulsionando! Es epiléptica reconocida, vengan.
- Pero dígame...
Y aquí es cuando ha intervenido el maravilloso psicólogo:
- Hola, mi número de colegiado es blablabla tenemos una emergencia.
Y ya está, venían, simplemente porque la palabra médica es sagrada, ¡jódete!
Llegamos y la meten corriendo a un box de esos, sin decirnos nada. De repnte, salen y aprovecho para entrar. Ojos cerrados, pero respira normal. Unas manchas rojas empiezan a aparecer por su cara y la noto arder sin previo aviso pero antes de poder decir nada...
- ¿Es alérgica a algo?
- Al primperam -el loquero está en todo-
Y entran corriendo a quitarle, obviamente, el primperam, porque claro es mejor pedir perdón que permiso. ¡Casi me la matan! Después de estabilizar la reacción alérgica convulsiona de nuevo y, por fin, le dan un antiepiléptico (venga, que si tardáis más se le pasa solo). Tras cabrearme por todo esto, por fin me dejan estar con ella. Creo que nos miran mal por ir con un psicólogo, que no sé qué tiene que ver pero no veas cómo me aburro. Por suerte, Andy no tiene nada mal, sólo un cuadro agravado de estrés... ¿Tratamiento? Vacaciones (claro, doctor, si las paga usted...).
Tres horas más tarde, o cuatro, volvemos a casa (eso sí, en ambulancia, que algún privilegio tenía que haber)...
No os preocupéis hermosas criaturas que nuestra escritora estará perfecta en que duerma unas horitas, así que feliz martes (yo me conformo con que no suceda nada más).
¡Besos!
Madre mía tú sí que sabes narrar, jamás me había reído leyendo algo así aunque admito que sólo me he reído tras leer que nuestra princesa está bien ❤
ResponderEliminar